#ENTREVISTA
Patricia Sosa Castellanos (Paty Sosa), es una mujer líder, trabajadora y decidida que desde hace 30 años, trabaja de cerca con síndicatos, luchando por condiciones dignas para las y los trabajadores. En 2021, Paty se convirtió en la primera mujer en ocupar la Secretaría General de la Confederación Autónoma de Trabajadores y Empleados de México (CATEM) en Baja California.
En entrevista exclusiva para La Costilla Rota, Paty nos contó más sobre sus orígenes, su impresionante trayectoria y su visión como lidereza sindical para que la justicia social laboral pase también por reducir y eliminar las prácticas de violencia contra las mujeres.
AR- Paty, platícame un poco de ti, dónde naciste y creciste, cuál ha sido tu trayectoria y cómo es que llegaste a encabezar la CATEM.
PS- Vaya que es una pregunta que puede remontarnos a hace 30 años, yo nací en Tuxpan, Veracruz, soy originaria del puerto de la parte norte del estado, estudie mi carrera básica- media en Tuxpan, me traslado a Monterrey a estudiar mi carrera académica, la licenciatura en psicología, la naturaleza de hoy mi profesión sindical obedece en primera a los valores que me dieron y conocí propiamente en casa y en familia, yo siempre digo que los valores se amamantan y con eso me refiero a que en casa y el núcleo familiar que es lo más valioso que tenemos que resguardar y guardar para con todas las personas que tratamos cuando les damos formación, educación, visión y que buscamos ser las partes de un proyecto macro como lo es CATEM, el tema de los valores juega el rol más importante de la columna vertebral y los principios y valores que le damos a la institución. Y ¿de dónde viene esto? Bueno, bueno. De una familia de esfuerzo; una madre fuerte, que si bien es cierto, ella fue una gran luchadora social en la comunidad, mi padre fue ebanista; ambos me crearon siendo la última de la familia, de seis hijos fui la sexta. Así que después de llegar a ser la hija menor, pues también fui una hija consentida a la que le pudieron dar no tan sólo cariños y afectos; conocí esa parte, la parte bonita de una familia que te acoge y te da el apoyo, donde mucho sacrificaron entre los hermanos que podían trabajar, que eran los mayores y mis propios padres, para darme el estudio académico que me permitió tener la carrera. Así que, en este tenor, yo crecí conociendo lo que es el apoyo, el esfuerzo que hace una comunidad cuando quiere salir adelante y donde se suman los esfuerzos de todos para poder decirle a las autoridades en la instancia que requieren servicios, que requieren atención, que requieren salud y cómo esos esfuerzos colectivos desde la comunidad hicieron que el entorno donde vivíamos se fuera transformando de ser un modesto colonia o fraccionamiento a convertirse en uno de los fraccionamientos que hoy quedaron en la zona central del puerto más bello que tiene ahí en el estado, Tuxpan, Veracruz.
En mi carrera, me encontré con la sensibilidad que para poder encontrar el equilibrio estudiando psicología, me direccioné al área productiva, así que ¿dónde tomo las primeras letras de de la productividad de poder trabajar en el desarrollo organizacional? pues lo tomo del CEU en este caso, en Nuevo León y me da la parte grata de saber que puedes tocar a una familia y a una persona dándole las herramientas necesarias para que pueda transformarse en lo que realmente anhela. Participo en el trabajo desde la universidad y en los trabajos que nos dan las ofertas para quienes egresamos en la facultad, que se dieron de manera inmediata. Así que el tema de trabajar con las primeras empresas, pues, desde reclutar, capacitar, dar las inducciones y llegar a una escala de jefatura de Recursos Humanos es algo que hice en un año.
Mi familia migró, somos una familia migrante, digo yo, porque siendo nacionales migramos de un estado a otro primeramente por el estudio, pero no me quedé en Monterrey; viví un año en la ciudad de México por cuestiones de trabajo, me contratan en Tijuana y me mandan a trabajar con esas veces que dices que eres joven y que no tienes problema, ni de horario, ni de viaje ni de nada. Pues entonces me contrataron y me mandaron a Tecamachalco; así que mi primer año de experiencia laboral completo como jefa de recursos humanos, la viví en una empresa de alimentos que tenía un contrato colectivo en ese entonces con un sindicato gastronómico, que me da la experiencia en ese momento de quedarme con un sabor amargo y aborreciendo la práctica fea de los sindicatos que nos llegaron a extorsionar y amedrentar, nunca con la representación de trabajadores, sino buscando qué sacar de manera personal para sus filas, así que con esa parte no me desanimo al tema sindical. Yo veo ahí que hay un campo de oportunidad en la que las empresas y los jefes de recursos humanos tenían cargas que no necesitaban tener si a quien se le debería de tener como aliado es al sindicato. Y la parte sindical la conocí en mi casa, la conocí con el trabajo de desarrollo, ayudando a los trabajadores y ayudando al patrón. Y esta es la primera enseñanza que recibo, lo último que hubiera esperado en mi casa, mi familia, mi madre es que yo me dedicara al tema sindical: «¿por qué razón, Patricia, tuviste que venir a meterte al tema del que yo salí para dedicarme al hogar?», me preguntaba, mi madre… bueno, creo que el ADN lo traes, y las oportunidades, no las busqué, se presentaron las circunstancias coyunturales y siempre relato una historia breve de cómo introduzco:
Yo vengo de México. Terminó de topar todo lo que podía escalar en una empresa, veo que las buenas prácticas impulsando a los trabajadores, dándoles a veces la palma que necesitan en el hombro, no necesitaban más, no pedían incrementos salariales… en ese momento, lo que pedían era un trato justo y digno en el trabajo. Y cuando pudimos cambiar la atmósfera, logramos mayor productividad, menor rotación y logramos que trabajaran con un nivel productivo. Con menos plantilla, logramos hacer mejor productivo y de calidad los servicios donde estábamos con esa experiencia.
Luego, yo quería no quería estar sola en Tecamachalco o en la ciudad México, me regreso a Tijuana, me voy a convivir con mis hermanos que me invitan a la apertura de un bar de unos amigos de la familia y de ellos, y resulta que en ese y en esa reunión me toca compartir la mesa y la barra con con algunos invitados y amigos también de ese grupo que yo no conocía, en la plática que salió conté qué hacía y les interesó mucho saber la experiencia que traía con los sindicatos y ¿qué crees?, uno de los presentes me dijo: yo conozco al sindicato, al líder del sindicato que tenías, se llama fulano de tal y son de la central donde estabas. Y yo le conté la experiencia amarga de la impresión negativa de lo que habíamos vivido y de cómo la empresa se veía forzada a tener que complacer y caer, porque si no, las filas de un comedor industrial viéndose entorpecido nos ocasionaba la pérdida, nos podía haber ocasionado a parte de daños y perjuicios las pérdidas con esta situación.
Luego, esta persona me dice ¿y ahora qué vieres hacer aquí?, a lo que yo respondo que voy a buscar trabajo, y que me dice: ¿y no te gustaría trabajar conmigo?.
¿Qué? ¿pues tú a qué te dedicas ahora?, platícame de ti, le dijo yo, y él me contó: Bueno, pues yo soy líder sindical, yo también, yo tengo un sindicato y conozco a los del medio, pero yo no soy como los que tu conociste antes. Así, sin pensar más simplemente le dije sí, y me dijo pues te espero mañana a las ocho de la mañana en la oficina y al otro día a las ocho de la mañana yo ya yo estaba en su oficina con una serie de carpetas platicando y retro alimentándonos de lo que sería el trabajo. Y le propongo entre la plática, que se le diera vida a la Secretaría de Previsión Social para atender a los trabajadores y darles la orientación, la asesoría que necesitan para los beneficios y derechos que tienen y al área de Recursos Humanos para hacer esa tarea a la que a mí no me ayudaron a hacer cuando yo era Jefa de Recursos Humanos; estaba muy adelantada para mi tiempo. Déjame decirte, estoy hablándote de hace 30 años atrás, llegué a que se preocuparan los patrones porque decían: bueno ¿qué pasa? ¿qué acaso no te estamos pagando las cuotas? ¿por qué me mandas a la licenciada? o quítame la licenciada de aquí que me viene a alborotar, me están generado una grilla. Qué pasó con que les estás dando gorras y les estás diciendo que puedes resolverles problemas. Bueno, eso no limitó que pudiéramos hacer el trabajo. Les conseguí vivienda de créditos de INFONAVIT de aquellos tiempos en los que solamente con una firma del delegado, en aquellas tradicionales tarjetas verdes que tenían INFONAVIT en aquellos años, que conseguirlas era sumamente complicado o también se prestó mucho en aquellos tiempos al coyotaje y era muy común que decías ¿tú quieres crédito? pues dale una mochada de 1,000, 5,000 dólares y se vendían o hasta más, dependiendo las condiciones que te ponían. Bueno, en ese tiempo hice mi gestión, seguramente que en cuanto me vieron, pues me vieron con la inocencia característica de una persona que estaba haciendo su trabajo y también hubo una reunión para las personas que les conseguí viviendo en aquel tiempo por parte del sindicato y las preguntas obligadas que les hacía el delegado: «¿oye les están cobrando, les están pidiendo dinero?» pues no, la gente respondía lo que es. Trámites ante el seguro social, ante el INFONAVIT y conseguirles todo alimento, que tuvieran que ver que si era un tema de liquidación, es un tema de asesoría por el trabajo que tenían problemas, hasta los problemas conyugales maritales o de separación, asesoría de hijos o asesoría que tenían porque había problemas, siempre habido el tema migrante en baja ha ido de menos a más, pero siempre ha existido, así que nunca faltó. Había muchísimo trabajo y oportunidades de trabajar, así que me daba mi tiempo después de haber estado en México, Tijuana y Mexicali, que eran las plazas donde me movía, que me resultaban hasta chiquitas, me rendía el tiempo y la energía para la de todos lados, resolvía mi agenda del sindicato y de lo que tenía que atender y casi me sobraba medio día para poder hacer otras actividades. Y siempre me gustó promover cosas alternas, así que me veía envuelta generando, proyectos de emprendeduría de donde me sostenía adicionalmente de las participaciones que el sindicato me daba. De hecho, en ese tiempo, lo que hice fue prepararme en el tema de INFONAVIT en el trayecto de los años llego a involucrarme y me jalan como cuadro, pues en los cambios buscaban jalar y buscar algunas incursiones de cuadros nuevos en las que decían tiene que haber representación de mujeres y tiene que haber representación de jóvenes que entonces no nos escuchaban ni nos hacían caso, pero las carteras siempre existieron, siempre estaban ahí, en los comités ejecutivos. Así que hubo un crecimiento exponencial de mi parte en el tema de las firmas, cuando las empresas le empiezan a decir al del sindicato «Yo voy a firmar, pero que me atienda la licenciada» , yo voy a firmar, pero que venga la Lic. Sosa o la Lic Paty, y así se fue quedando el Paty Sosa, que venga Paty Sosa, pero que me atienda a ella. Se genera una sombra, se empezó a generar una parte incómoda, un tema de celo y un tema de amenaza que yo no lo vi nunca, porque la verdad es que desperté muchos años después, yo sólo quería trabajar, tener mi aspiración, de seguir creciendo, de seguirme preparando, de que cada curso que había que ofrecían por parte en ese entonces, de las filas donde crecí que fueron las de la CTM, y que la CTM hizo mucho en el tema sindical de sus orígenes y después se fue deteriorando porque los liderazgos no hicieron la tarea que les tocaba.Pero eso ya fue el tema que nos hizo accionarnos a hacer las iniciativas de creación, con los años los jóvenes que, como yo, teníamos el hambre de prepararnos, de estudiar, de incursionar, de tener una visión de cómo trasladarnos a bien, bien, y además diciendo Es que para que te vaya bien en la vida no necesitas y hablando de lo que todos somos aspiracionales, quieres tener una vida mejor; primero quieres tener casa porque no la tienes, quieres tener carro, porque no lo tienes, o quieres tener dinero en una cuenta porque quieres vacacionarte, anhelas tener unas mejores condiciones de vida para ti y después para la familia que vas teniendo. Eso es normal y necesario en todas las personas es humano, pero parecía un pecado el que tú lo anhelaras, nunca era tu tiempo, te tenías que esperar, tenías que estar sujeta a las migajas que te dieran. ¿Por qué? Porque los grandotes se quedaban, acaparaban y decían «no», pero tú eras importante solamente para servir, en el caso de las mujeres sólo para servirle a los varones, trabajarles detrás de la sombra y que ni siquiera te asomaras, porque si algo hacías, no era tuyo en el momento,
Déjame decirte que me incomodó ¿sabes cuáles son las cosas que me incomodan?… que hicieras el trabajo, que lucharas por algo y que te engañarán y te usaran y te dijeran en unas cosas que si, pero que a la hora que llevabas a cabo la realización del trabajo te decían «no» o «no va», cuando ya hiciste todo «cambiaron las agendas» , «eso no es importante», y tú decías: ¡esto lo necesitamos compartir con los demás! Cuando tú atiendes a una persona, una comunidad, a un grupo, a tus propios representados, tú recoges la sensibilidad, la problemática y de ellos mismos recoges las soluciones. Porque la verdad es que la mayor parte de los problemas, las mismas personas, saben cómo solucionarlas. Sólo hay que darles los respaldos, los apoyos y las voluntades que tienen que generarse con aquellos que están sentados en una silla de poder para que se ejecuten.
AR- ¿Qué se necesita para que haya mejores gremios de trabajadores en México?
PS- Hay una buena noticia. Lo que yo pensé que nunca iba a ver en la vida, y dije no, a mí no me va a tocar, me voy a morir y no lo voy a ver; ya lo estamos viviendo hoy. Hace cuatro años hubo un cambio en el país y la transformación de fondo en los cambios en materia laboral se dieron. Si bien es cierto que las reformas laborales empiezan años atrás, había que tener la osadía y la valentía de decir sí, no tan sólo van, sino que hay que hacerlos y hay que hacerlos bien y de fondo, eso significaba la reforma a la Ley Federal del Trabajo, el nuevo modelo de justicia laboral con el cual nos sujetamos hoy en día y que terminó de completarse el ciclo de transición a partir del 1 de mayo de este año. Así que la libertad sindical, la vivimos desde el 2019.
AR- ¿Cuáles son los principales retos a los que te has enfrentado al ser una mujer dirigente sindical?
PS- Pues estas generaciones deben agradecer en el caso de CATEM, la valentía y la osadía que tuvo Pedro Haces Barba, que es el senador líder secretario general de CATEM, quien hizo en los últimos 17 años, y particularmente hace 13 años conseguir la toma de nota y la constitución de la CATEM, la Confederación Autónoma de Trabajadores y Empleados de México. Él hace un recorrido en el país, busca liderazgos que también como él, y como todos, estábamos hartos y dijimos bueno, vamos a dejar de quejarnos y hagamos algo nosotros mismos, sabemos cómo hacerlo, podemos organizarnos, pero faltaba que el sistema, la política de gobernabilidad del país, diera las condiciones para que nuevas generaciones llegaran y se hiciera el cambio. Entonces ¿qué nos permite la nueva reforma? Llega el Convenio Internacional de la OIT, de la cual fuimos parte vivencial en el Congreso Internacional, en Ginebra, Suiza, en el 2018 y en el 2019 se cumplen el centenario. En esa conferencia se le da vida y se aprueba el Convenio 190, que también se ratifica en México. Este nos permite la libertad sindical y la democracia, pero sin coacción. Porque antes, si tú querías hacer lo que hicimos ahora, significaba que estabas expensas a que te dijeran “Oye, fíjate que somos un grupo de trabajadores que queremos organizarnos y tener nosotros un diálogo con los patrones, y que a lo mejor queremos, entre nosotros tener un sindicato” Si alguna vez tú escuchaste alguna historia como esa, también habrás escuchado que a todos esos trabajadores los corrieron, sin ninguna penalidad ni ni nada, por el patrón simplemente los podían correr por el argumento de desestabilidad en el trabajo, de grilla, de política, por lo que tú quieras o porque el mismo sindicato que quería la gente buscar cambiar al líder, el líder mayor decía «no», porque ahí tengo yo a mi secuaz, mi arreglo de arreglos y ese tiene que ser y no me lo mueven. Entonces, qué pasaba con los demás: los corrían o los expulsaban, y muchos liderazgos se fueron muriendo, apagando y desperdiciando grandes valores, pero otros que supieron esperar, supieron aguantar y en la transición se fueron sumando, y los fuimos sumando con Pedro Haces, en Baja California, hace cuatro años y medio, en el 2018 para ser precisos, hago una convocatoria en mi estado y decido renunciar a la CTM, decido renunciar al PRI, decido dejar todas las carteras, las encomiendas o cargos de todo tipo que tenía con todos ellos, para de manera libre prepararme, hacer lo que tuviera que hacer, pues el ciclo yo lo vi cumplido en mi historia sindical en esa central obrera, que si bien me dio escuela, y yo agradezco lo que aprendí, bueno y malo, creo que soy lo que por lo que he aprendido y por todas las personas que no todas fueron malas y no todas fueron violentas; hubo gente muy valiosa y muy buena que siempre estuvo cuidándome, apoyándome y hasta la fecha, me siguieron muchos de ellos, y algunos de ellos dijeron «Paty, pues nos estás llamando, dinos de qué se trata», a lo que yo les propuse: qué les parece si hacemos algo como lo que Pedro está haciendo a nivel nacional, pero lo hacemos en el estado, tomemos nosotros las riendas de las decisiones de una central obrera en Baja California, hagamos nuestra Federación de Estado y sumémonos a CATEM, vamos a adherirnos a la confederación con Pedro para hacer patente en Baja California, un nuevo sindicalismo, el sindicalismo moderno del que hoy hablamos, que es un sindicalismo que atiende las necesidades del trabajador, que somos de carne y hueso, que somos visibles, que somos localizables, que estamos las 24 siete en una llamada atendiendo las necesidades de negociación con los patrones o con los trabajadores, que somos un aliado del en la productividad de los patrones que nos importa su economía y su desarrollo empresarial, porque son las fuentes de empleo con las cuales nosotros podemos tener trabajo y ser aspiracionales a que nos paguen mejor, nos premien mejor, nos den bonos mejor, si la empresa está mejor, puedo negociar mejor, bajo ese contexto le empezamos a imprimir un sello distinto y había que dotar de algo, no bastaba únicamente lo que hiciéramos nosotros había que dotarnos de una estructura.
Así que a la alianza y a sumarnos de manera ya legal constitutivos con el reconocimiento de la Secretaría del Trabajo Previsión Social, es decir, nuestra toma de nota, ahora sí podemos llegar con Pedro a decir; Pedro ahora sí cómo ayudamos a que esta confederación esta visión y misión de la que vemos a los trabajadores con mejores condiciones de vida libres, democráticos, eligiendo a los liderazgos a que tengamos una fuerza laboral de verdad, que nos sigan por la convicción de los resultados que no somos eternos y puede dársele oportunidad de campo a los liderazgos jóvenes que hay que darle reeducación a los que están y formación a los nuevos cuadros a los que vienen. Bueno, eso lo empezamos a hacer, y en el periodo de Pandemia para adelantarnos un poquito, Pedro me invita a formar parte del Comité Nacional y me incorporó con él como secretaria de Relaciones Internacionales del Comité Nacional. Por eso te mencionaba que me había tocado ir a Ginebra a abrir los espacios con él a pavimentar el terreno internacional de las aperturas de la confederación y posicionarla; en los inicios esta fue una tarea de mis encomiendas en los primeros tres años, bueno hasta ahorita cuatro años que que hemos vivido en este período que nos dio una sacudida (la pandemia) y nos obligó a reinventarnos. También nos permitió como fortaleza esos dos años hacer el trabajo de escritorio que necesitábamos hacer. Hoy, somos una confederación certificadora ante la CONOCER (Consejo Nacional de Normalización y Certificación de Competencias Laborales), hoy somos una confederación que tiene los convenios internacionales más importantes, gracias a Pedro Haces, tenemos 16 convenios internacionales, hoy contamos con una plataforma de Universidad CATEM, con una plataforma de ingles CATEM, hoy contamos con preparatoria, ya no hay pretexto para que uno de los trabajadores, su familia o su pareja, quien sea, tenga las puertas abiertas y de acceso para que se prepare, se estudie y con precios mucho, muy por debajo, porque gran parte del subsidio lo pone en la confederación, ya lo logró el sindicato, entonces, qué tenemos que hacer, pues también quitarles cargas a los patrones, no todo lo puede sacar del patrón, hay cosas que uno tiene que hacer, hay cosas que gestionamos con el gobierno y aligeramos temas de intermediación o de mediación también sea para el trabajador o sea para el patrón. Así como te decía, si hay algo que le duele a la empresa y es un tema que vemos que es de afectación externa por supuesto que nos solidarizamos y nos sumamos como Federación de Estado o como confederación a hacer una voz más que acompañe esas causas.
AR- ¿Qué es lo que te gustaría lograr o cuál sería tu legado en tu paso por la CATEM?
PS- Lograr que las nuevas generaciones entiendan que sí podemos hacer realidad un cambio en México para las mejoras y que todos tenemos la posibilidad y la oportunidad de vida de cambiar nuestras historias para mejorar, sin necesidad de chingarse a nadie.
AR- ¿Qué opinas de hacer equipo con más mujeres?
PS- Totalmente a favor; la fuerza laboral de las mujeres es muy importante. Mira yo incorporo la mitad de mi comité ejecutivo y no porque sea un tema de equidad 50 y 50, si hay más bienvenidas las demás mujeres, hoy tengo más mujeres en mi comité ejecutivo que varones.Yo fui la primera mujer en el comité nacional; siendo mujer en el comité de Pedro, hoy somos siete Secretarías de Estado, algo que no se hubiera visto hace años, éramos contadas, hoy habemos muchas o incluso más mujeres a cargo de secretarías del Comité Ejecutivo Nacional Mujeres empoderadas en el Comité Nacional, hoy tenemos una libertad de expresión y de liderazgo que planteado inmediatamente acciona, yo lo mismo escucho a mis varones que a mis mujeres, pero por supuesto que la sensibilidad de las mujeres cuando me dicen esto y no me responden o aquí me están haciendo daño o siento alguna amenaza les creo, eso es lo primero que sientan la confianza de que les creemos cuando nos dicen que tienen alguna agresión psicológica, física o de simulación a las oportunidades de desarrollo que ellas deben de tener. Les creo cuando me dicen que tienen algún problema en el trabajo y les creo cuando me dicen que se sienten intimidadas por una mirada de acoso y les creo y las defiendo y ponemos las cosas en orden de manera inmediata. Les creo cuando me dicen que quieren vivir mejor, pero lo que no saben cómo y les ponemos en la ruta correcta para que tengan las herramientas adecuadas.
AR- ¿Qué consejo les das a las mujeres que están participando en espacios de liderazgo y toma de decisiones?
PS- Que también crean que hay mujeres que necesitan de su apoyo para abrir espacios de oportunidad en el escalafón para seguir ascendiendo. Porque así como me he encontrado mujeres que abren espacios y te apoyan, me he encontrado con algunos casos en los que el machismo se ve más reflejado en ellas que en los varones, entonces quiere decir que en la cultura y la formación nos falta hacer mucho trabajo, como siempre, las mujeres hacemos dobles o triples esfuerzos, así que en este caso esa tarea de seguirnos preparando y de apoyarnos entre mujeres sean de cualquier tipo de pensamiento, de asociación, de religión o creencia, de preferencia, de condición, no importa, somos mujeres y siendo mujeres de cualquier parte del mundo, creo que nos necesitamos apoyar.
En el tema sindical éramos solamente el adorno y las que en campañas teníamos que ir a los cruceros y y poner bonitos los eventos, vestir, colaborar… hoy nuestro rol va más allá en los espacios, hay un gran reconocimiento también de los varones, porque los varones están reconociendo a las mujeres y lo dicen, yo prefiero también hoy tener mujeres colaboradoras muchos de ellos, si bien es cierto, les cuesta trabajo sujetarse a los mandos de una mujer, los hombres más inteligentes dicen “Yo me siento muy contento de tener una colaboradora jefa que me ayuda a una directora, una magistrada, una senadora, una presidenta municipal, una gobernadora como la que estrenamos en nuestro estado Marina del Pilar, que es una joven mujer, que está dando un gran ejemplo también de liderazgo y de lo que como mujer, madre, que es llevar la gobernabilidad de un estado como Baja California, también no es cosa menor siendo la primera en el estado. Así que, yo creo que estas brechas están dando cerrándose de manera muy interesante y hay mujeres hoy, secretarias de Estado que no hubiéramos podido ver y hoy las podemos ver, tenemos una secretaria de Gobernación, la segunda, la de energía, que no son cargos menores… estamos hablando de un empoderamiento real, con embajadoras y en espacios de todo tipo.
AR- Muchas gracias, querida Paty, es para mí un honor poder platicar contigo, estar contigo y plasmar esto en esta entrevista que compartiremos con nuestras lectoras. Es enriquecedor conocer personas y mujeres que están haciendo tantas cosas y que están luchando allá fuera. Muchísimas gracias.
PS- Encantada, muy amable por toda la atención, por el obsequio de esta libreta de La Costilla Rota, lo valoro mucho y a seguir trabajando de la mano y felicidades a La Costilla Rota. A todas las que las ven y las leen, las invito a seguirme: Yo soy Paty Sosa, me encuentras en el Face, y como @patisosac en todas mis plataformas. Y como dirigente, me encontrarás en nuestras páginas, es muy sencillo además, poderte afiliar y seguirnos en www.catembc.org ¡estamos a tus órdenes!
