Por Dolores Colín
Los asesinatos de mujeres están imparables. El trabajo de muchos años, de mujeres comprometidas con el género, ha logrado establecer la necesidad de investigar las muertes por violencia de las mujeres bajo el protocolo de feminicidios. Actualmente, se estima que mueren asesinadas 10 mujeres al día.
Por ello, el propio ministro presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, recientemente presentó en el Senado un proyecto de iniciativa para que todas las muertes por violencia de mujeres sean investigadas como feminicidio. Uno de los objetivos de la iniciativa es frenar la violencia y muerte de mujeres y niñas.
Sin embargo, en los hechos, los asesinatos de mujeres que se investigan como feminicidios son los menos. En realidad, la urgencia que tenemos en la sociedad mexicana es eliminar el flagelo que es la violencia y muerte contra las mujeres, sin embargo, ocurre todo lo contrario, las cifras van en aumento.
¿Pero cómo resolver el grave escenario de los feminicidios en México? Pareciera que será imposible prevenir y evitar los feminicidios, si la impunidad se impone. No hay castigo para quienes ejercen violencia de género y cometen homicidios que configuran feminicidio. Urgen políticas públicas que atiendan este flagelo. Urge dar certeza a la vida de las mujeres.
