La señal de auxilio frente a la violencia

Usted se imagina ¿qué pasaría si todas las mujeres, que están sufriendo un control opresor por parte de su pareja, puedan usar como herramienta la señal de auxilio?

por Angelica De la Pena

Por Angélica de la Peña

El pasado 16 de febrero en Michoacán, Alicia Villarreal llamó la atención del público y de los medios porque al finalizar su concierto hizo la señal que se inventó para llamar la atención indicando que se está en una situación de violencia doméstica.

Ese mensaje de Alicia se hizo viral en todas partes. Ella no tuvo que decir nada, sólo levantó el brazo mostrando la palma de su mano, dobló el dedo pulgar hacia adentro de la mano y cerró los cuatro dedos dejando el pulgar adentro.

Su señal de auxilio era cierta, como lo fue para tantas mujeres que durante la pandemia del Covid tuvieron que estar encerradas con su violentador. Las mujeres indefensas no había manera salieran a un refugio. Así que esta señal de auxilio, diseñada por la Canadian Women’s Foundation y subida a las redes, constituyó la herramienta de salvación de muchísimas mujeres.

El predominio de un hombre contra una mujer es más común de lo que se cree, y los señores pueden ser muy buenos vecinos, tener imagen de buenas personas, pero en la relación de pareja suelen ser desde celosos controladores, hasta malévolos y terribles golpeadores. La opresión que ejercen lleva a muchas mujeres a sobrevivir depresión, tristeza, frustración y miedo.

Y nada cambia. Las encuestas sobre relaciones en el hogar desde 2003 siguen coincidiendo en que dos de cada tres mujeres más de 15 años han sufrido algún tipo de violencia por parte de sus parejas o ex parejas. A lo largo de sus vidas ha sufrido violencia psicológica el 51.6%; violencia sexual el 49.7%; violencia física el 34.7%, y violencia económica y/o patrimonial y/o discriminación en su trabajo el 27.4%.

Tener un padre golpeador es el peor ejemplo para un niño; la sumisión de las madres por su parte, también es el peor ejemplo que reciben las niñas. Así se ha venido perpetuando estos comportamientos en las relaciones familiares. Es un círculo que no se puede romper solo con voluntad o sensibilizando a los señores. Es un problema social sistémico y estructural. Que debe ser enfrentado como lo que es.

La educación en el reconocimiento de niñas y niños como pares es esencial, es un equilibrio respecto de la información cotidiana que viven en sus familias. Lo mismo en la comunidad; debe haber mensajes hacia la población: la violencia contra las mujeres es un delito y ellas deben saber que no están solas. El Estado en los tres órdenes de gobierno deben atender, prevenir y en su caso sancionar sin pretextos. En la realidad el mejor aliado de un violentador es el ministerio público que le sugieren a una mujer que denuncia, que no haga enojar “a su señor”.

Usted se imagina ¿qué pasaría si todas las mujeres, que están sufriendo un control opresor por parte de su pareja, puedan usar como herramienta la señal de auxilio? ¿Las autoridades están preparadas para atender todos los casos que derivan de esa señal?

Por eso cuando dicen que los hombres también sufren violencia por parte de sus parejas, la respuesta es contundente: no es lo mismo: las mujeres sienten un miedo terrorífico, sin condiciones objetivas para igualar la fuerza de un señor. Fueron educadas para obedecer.

Cuando decimos que el machismo mata, es porque 11 mujeres son asesinadas al día por su pareja o ex pareja. Las leyes deben aplicarse, ponerse un detente, bajar las cifras. Por la vida y la libertad de las mujeres.

Defensora de derechos humanos

Las opiniones compartidas en la presente publicación, son responsabilidad de su autora y no reflejan necesariamente la posición de La Costilla Rota.  Somos un medio de comunicación plural, de libre expresión de mujeres para mujeres.

Loading

Comenta con Facebook

También te podría interesar

Ir al contenido