Por Gabriela Mayorga
Ser mamá es una experiencia transformadora, uno de los mayores cambios se refleja en los tiempos libres, la labor del maternaje implica un amor ilimitado y una dedicación que no tiene descanso, se trabaja las 24 horas del día, los 7 días de la semana, sin vacaciones. Ante mi reciente inmersión en este mundo no dejo de preguntarme ¿cómo le hacen las mujeres que son mamás para cumplir sus sueños?
Sabemos que la brecha de género se metió hasta nuestros hogares, de acuerdo con el INEGI, al momento de casarse las mujeres pierden 7.3 horas de tiempo libre, caso contrario a lo que pasa con los hombres, ya que ellos ganan 2.9 horas. Además, las mujeres trabajan 6.2 horas más a la semana que los hombres, eso sin tomar en cuenta la labor que requiere criar a un ser humano, de acuerdo con un estudio de Welch —empresa estadounidense especializada en salud y nutrición— revela que la maternidad involucra hasta tres veces más trabajo que cualquier otro oficio o profesión, eso dicen los datos, pero en el plano real nos encontramos con mujeres a medias, de ellas, de sus profesiones, de su desarrollo, sino estamos con mujeres agotadas bajo el papel de superwoman.
El poco tiempo libre que tenemos las mamás no es un problema individual, sino un reflejo de desigualdades estructurales arraigadas en la sociedad, habemos quienes contamos con una red de apoyo, pero a pesar de eso los estigmas no se quitan, los pensamientos de culpa como: “mi mamá no tuvo ayuda, por qué yo debería de tener” o “mi abuela tuvo 14 hijos y nunca necesito apoyo”, lamentablemente persisten y resisten, encaminándonos a una sobreexplotación llena de culpabilidad.
¿Cómo cumplimos nuestros objetivos y aspiraciones ante la adversidad del poco tiempo libre?, ¿cómo vivimos la crianza sin el abandono de nosotras mismas? Nuestros sueños profesionales y personales no acaban con la llegada de nuestros hijos, todo lo contrario, aumentan y hasta ellos fungen como un motor de motivación, pero es un hecho que el tiempo es el verdadero reto.
La solución puede implicar un equilibrio en la pareja, confianza en tu red de apoyo, soltar la culpa, pero ante una sociedad ampliamente impactada por la desigualdad, es necesario un enfoque integral que incluya cambios en las actitudes sociales, políticas laborales más inclusivas y un mayor apoyo a las familias, un camino largo por recorrer, que puede comenzar reconociendo que no está mal pedir ayuda.
@gabymayorgaa
Referencias:
https://animalpolitico.com/2020/10/mujeres-trabajo-no-remunerado-semana-mas-que-hombres