Erika Sánchez Basaldúa, era una joven de 25 años que trabajaba para salir adelante en Tulum, Quintana Roo y vivía en Playa del Carmen. Tras salir de su jornada en un día normal en Junio de 2019, ya no se le volvió a ver.
Tras tres días de búsqueda su cuerpo fue hallado en una maleta con signos de brutal violencia.
La familia de Erika y colectivas feministas, tuvieron que salir a exigir que el caso fuera investigado adecuadamente y que el responsable del brutal feminicidio fuera localizado y juzgado por su crimen.
Después de 3 años de permanecer prófugo, el presunto feminicida Guillermo N, quien fuera roomie de Erika en Playa del Carmen, fue detenido en Oaxaca y llevado a Quintana Roo, donde fue finalmente vinculado a proceso por el delito de feminicidio.
Colectivas feministas de la entidad celebraron la aprensión del sujeto a quien calificaron como un peligroso feminicida y exigieron a las autoridades un proceso apegado a derecho que sancione de manera ejemplar a quien abusando de la confianza de Erika, la privó de la vida brutalmente.
Exigimos #JusticiaParaErika
Con información de la Fiscalía de Quintana Roo